
Crónica
Transcripción de los cables: Jesús Suaste Cherizola
El presente documento compila una serie de comunicaciones interceptadas a diversas agrupaciones involucradas en la toma de Ciudad Universitaria.
Fragmento del Primer Comunicado del Ejército de Chinches de Liberación Nacional (EChLN) tras la toma de los planteles universitarios: Informamos a nuestros milicianos y bases de apoyo que las primeras divisiones de nuestro ejército tomaron con éxito las facultades de Química, Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, Odontología, Arquitectura y Veterinaria. Las autoridades del mal gobierno han puesto en marcha una campaña de desprestigio contra nuestro movimiento, suspendiendo labores en diversos planteles para evitar que fraternicemos con los estudiantes. Se ordena a todos los comités redoblar esfuerzos para romper el cerco mediático y establecer contacto con las bases estudiantiles, a quienes reconocemos como nuestro principal aliado en la lucha por un país más justo. Instamos a todas nuestras fuerzas a mantenerse en alerta. Pronto daremos a conocer nuestra palabra al mundo.
Crónica de la toma de los planteles universitarios, publicada en Zumbido Revolucionario, órgano informativo del EChLN: El ingreso a los planteles universitarios se desarrolla con entusiasmo y disciplina. Al tomar posesión del lugar, las chinches levantan sus campamentos, construyen barricadas con ramas y piedras diminutas, cuelgan imágenes de Don Durito de la Lacandona y la hormiga Flik, repiten la consigna identificadora (¡E Cheta Ele Ene!), hacen pintas (El capital, insecticida universal / ¡La Cucaracha camina de nuevo! / Cuotas no, fumigación menos) y se desgañitan en el coro del guacarrock soberanista: ¡Chin-che, Ma-Lin-Che, lo Cortés no quita lo Cuauhtémoc!
Saben las chinches rebeldes que su alzamiento las ha arrojado a peligros inminentes. Se avecinan arduas jornadas de lucha, días de brigadeo, asambleas extenuantes. Esta noche, sin embargo, todo es júbilo y fraternidad. La Comisión de Cocina ya llama a cenar. Las chinches se reúnen alrededor de las fogatas, entregan sus abundantes caderas al baile y se abrazan en el ensueño de construir un mejor mañana.
Borrador de la Primera Declaración de las Chinches Rebeldes, dirigida a los seres humanos en general y a los estudiantes en particular:
Nosotras, las más pequeñas, las olvidadas de la urbe,
Nosotras, las habitantes de las grietas de la historia, las tantas veces perseguidas por el único pecado de no adecuarnos a los estándares de belleza hegemónicos…
Por nuestra voz hablan centenares de grupos representados en la Asamblea General de Artrópodos y millones de especies organizadas en la Coordinadora Inter-Phylum de Animales en Rebeldía. Nos dirigimos respetuosamente a los estudiantes universitarios de México para dar a conocer las razones de nuestro levantamiento, seguras de que encontraremos comprensión en su oído y disposición revolucionaria en sus corazones.
Queremos decirles que nada tienen que temer de nuestra incursión en sus escuelas. Nuestra voz no viene a faltar el respeto a nadie; mucho menos a iniciar hostilidades. Sabemos que el cambio climático está imponiendo a todas las especies del mundo desafíos que necesitan respuestas inmediatas.
Ante ello, consideramos urgente entablar un diálogo que nos permita replantear, de manera democrática y racional, los nuevos términos de nuestra coexistencia planetaria. Los grupos insurgentes nos trasladamos a la Ciudad Universitaria en busca de una alianza con los estudiantes universitarios, a quienes invitamos a trabajar conjuntamente para organizar el Primer Encuentro Por la Vida y Contra el Neoliberalismo y el Insecticida, en el que nos reuniremos a discutir cómo evitar que los humanos acaben con ellos mismos y con el planeta.
Estudiantes universitarios: el tiempo corre y deben tomar partido. La Rectoría amenaza con muerte y fumigaciones. Sólo la movilización de masas podrá llevar a buen puerto nuestro levantamiento. Al salir a la luz, las chinches rebeldes hemos puesto nuestro destino en sus manos. Les pedimos que no aplaudan. Debajo de ustedes estamos nosotras: militantes y bases de apoyo del EChLN.
Fragmentos de minutas e informes de colectivos que mantienen la ocupación de los planteles:
- La asamblea acepta la propuesta de que la alianza con hormigas y abejas sea sólo con las obreras. Se exhorta a las susodichas a organizarse y acabar con todo vestigio de organización monárquica.
- Se incluye en el pliego petitorio la demanda de las compañeras cucarachas: “Los humanos nos tienen un grado de aversión que no se corresponde con nuestro talante inofensivo. ¡Ser feo no es delito! Es más: ¿por qué nos consideran feas? Feo, votar por el PRI”.
- Fragmento del artículo “Ideología y arte popular”, publicado en la revista filosófica El Haxápodo Implume: “‘El Piojo y la Pulga’ es una canción acerca de dos compañeros que se quieren casar en medio de las penurias económicas del capitalismo, pero la solidaridad popular sale al quite y permite que se consume el matrimonio, haciendo patente la potencia de la autogestión y los vínculos comunitarios…”.
- Una chinche se dirige al Comité de Honor y Disciplina denunciando que las compañeras de un colectivo rival le escondieron sus tres zapatos izquierdos para que en la competencia de cumbia no pudiera exhibir toda su destreza. Exige la reposición de la competencia y castigo ejemplar a los perpetradores.
- La asamblea interna del Colectivo Comandanta Ramona lleva dos días atorada en los saludos iniciales porque, fieles a la tradición zapatista, insisten en nombrar a cada uno de los grupos representados en el Congreso Intergaláctico de Bichos: Blattodea, Coleoptera, Dermaptera, Diptera, Ephemeroptera, Grylloblattodea, Hemiptera, Hymenoptera, Isoptera, Lepidoptera, Mantodea, Mecoptera, Megaloptera, Neuroptera, Odonata, Orthoptera, Phasmatodea, Phthiraptera, Plecoptera, Psocoptera, Raphidioptera, Siphonaptera, Strepsiptera, Thysanoptera, Trichoptera… Va para largo porque el número de especies está en el orden de los millones.
Extracto de un comunicado del Frente Artrópodo Separatista: Leemos con asombro que las fuerzas del EChLN intentan trabar alianzas con los estudiantes de las facultades tomadas. Esta política es un error por dos razones. Primero: los estudiantes apenas pueden terminar sus tesis, qué van a andar acabando con malos gobiernos. Segundo: es inadmisible que, en nombre de un universalismo abstracto, los representantes de una especie noble como las chinches quieran fraternizar con una especie cuya crueldad es un signo de vergüenza para la biosfera entera. ¿Han visitado los mataderos donde, cada día, los humanos someten a una tortura incesante a millones de animales? ¿Han visitado los laboratorios donde ratas y conejos son sometidos a los experimentos más crueles para producir cosméticos? Aquí no se trata de lo que cada especie tiene que hacer para sobrevivir, sino de un sufrimiento gratuito que los humanos le infligen a vacas, cerdos, pollos, pescados, conejos, langostas y otras tantas especies. No sabemos si los humanos son inteligentes, pero no hay duda de que es infinita su indiferencia hacia el sufrimiento. ¿Por qué los insectos tendríamos que formar una alianza con una especie tan envilecida? Los humanos no son los guardianes del ser; son los torturadores del reino animal.
Volante del Comité de Propaganda con cánticos modificados para promover la unidad insecto-estudiantil:
- Únete humano, ve con la hormiga, no le hagas caso a la Rectoría.
- Si tú pasas por mi nido / y tú ves a mi mamá / tú le dices que hoy no regreso / estoy con los humanos / en la universidaaaad. / Tú le dices que no se preocupe / si llega el estudiante / nadie va a fumigaaar.
- Alerta, alerta, la chinche ya camina / por una patria libre, popular y campesina.
Fragmento de un manifiesto del Colectivo de Anarcochinches: La premura con que chinches y estudiantes están pidiendo la reapertura de los planteles y el regreso a clases se funda sobre un análisis equivocado del papel que juegan las universidades en la sociedad actual.
Comencemos por reconocer que la universidad es un asunto de élites. Sólo una minoría accede a la universidad; son todavía menos los que se titulan, son todavía menos los que pueden encontrar un trabajo bien remunerado gracias a su título. De estos últimos, pocos lo hacen en un trabajo no alienante.
Luego está el tema de la explotación: a la universidad la sostienen profesores de asignatura con sueldos bajísimos y en condiciones laborales muy precarias. Si juzgamos a la UNAM por el hecho de que el grueso de su fuerza laboral docente tiene los mismos derechos que el trabajador de un Walmart, debemos concluir que se trata de una institución eminentemente reaccionaria.
La cosa puede ponerse peor: imaginemos que un estudiante decide dedicarse a la academia: ¿ha visto cómo se llaman esos artículos que tanto se empeñan en publicar? Por ejemplo: “Repetición de lo que dijo un señor alemán hace muchos años acerca de lo que dijo un señor griego hace todavía más años: una relectura desde un enfoque postnosequé y transnosecuánto”. ¿No creen que el camarada Diógenes ya hubiera utilizado todas esas publicaciones para poner fin a la crisis de papel higiénico que hay en las facultades?
Los defensores de las universidades aducirán que su clausura representaría una derrota para las causas populares, sin reparar en que lo realmente imposible es concebir un sistema todavía más excluyente de lo que hoy tenemos: ¿A cuántas personas más se les puede reducir el acceso a la universidad? ¿Cuánto menos se le puede pagar a un profesor de asignatura? ¿Cuánto más habría que reducir la eficiencia terminal? ¿Cuánto menos puede valer un título?
Con perdón para los compañeros de la Huelga del 99, pero si hoy cerramos la universidad, y además garantizamos que mañana también esté cerrada, tal vez estemos abriendo la posibilidad, por fin, de que México tenga una educación pública, científica y popular. Los sucesivos movimientos estudiantiles se han limitado a maquillar esa gran fábrica de exclusión e ignorancia llamada universidad. De lo que se trata es de abolirla.
“Informe sobre los usos y costumbres de las asambleas estudiantiles”, elaborado por la Comisión de Documentación, solicitando al Centro de Formación Política que difunda esta información entre todas las chinches militantes para que sepan cómo comportarse: 1. Asamblea que dura menos de cinco horas no es asamblea. 2. Cuando los moderadores preguntan si ya es hora de votar el punto, la mitad de la concurrencia debe manifestar que todavía no se ha discutido lo suficiente, mientras la otra mitad ofrenda lo mejor de sus gargantas al grito de “¡vótalo, mesa!” 3. Si la asamblea encalla, los participantes deben disputarse el uso de la palabra gritando repetidamente “¡moción de procedimiento!” mientras hacen con las manos una señal de “tiempo fuera”. 4. Antes de comenzar el orden del día, la asamblea debe determinar si las decisiones se tomarán por consenso o por mayoría (nota: determinar si esa decisión debe tomarse por consenso o por mayoría amenaza con sumir al movimiento en una regresión al infinito como la que plantea Aristóteles acerca del primer motor). 5. Cada cierto número de intervenciones, un orador le advertirá a la asamblea que se está perdiendo de vista el verdadero problema de raíz que es la propiedad privada de los medios de producción. 6. La asamblea no es una prueba de velocidad, sino de resistencia.

El Centro de Espionaje de la OPGM (Organización Para Ganarle a los Malos) solicita a los camaradas de la Revista Común que pongan estas comunicaciones a disposición de los sectores más conscientes de la izquierda revolucionaria para que procedan conforme a lo que dicte el análisis dialéctico de la situación concreta. (Transcripción de los cables: Jesús Suaste Cherizola).